Ten piedad de m, oh Dios, por tu bondad,
por tu gran compasin, borra mis faltas!
Lvame totalmente de mi culpa y purifcame de mi pecado!
Porque yo reconozco mis faltas
y mi pecado est siempre ante m.
" Contra ti, contra ti solo pequ,
e hice lo que es malo a tus ojos."
Crea en m, Dios mo, un corazn puro,
y renueva la firmeza de mi espritu.
No me arrojes lejos de tu presencia
ni retires de m tu santo espritu.
Devulveme la alegra de tu salvacin,
que tu espritu generoso me sostenga:
Abre mis labios, Seor,
y mi boca proclamar tu alabanza.
Salmo 51 (50):3-4, 5-6AB, 12-13, 14, 17
Jess dijo a sus discpulos:
Tengan cuidado de no practicar su justicia delante de los
hombres, para que sean vistos por ellos: de lo contrario, no recibirn
ninguna recompensa del Padre que est en el cielo. Por lo tanto,
cuando den limosna, no lo vayan pregonando con trompetas delate de
ustedes, como hacen los hipcritas en las sinagogas y en las calles,
para ser honrados por los hombres.
Les aseguro que ellos ya tienen su
recompensa. Cuando ustedes den limosna, que tu mano izquierda ignore
lo que hace la derecha, para que tu limosna quede en secreto; y
tu Padre, que ve en lo secreto, los recompensar.
Y cuando ustedes oren, no hagan como los hipcritas: a ellos les
encanta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las
calles, para que sean vistos por los hombres. Les aseguro
que ellos ya tienen su
recompensa. T, en cambio, cuando ores, retrate a tu habitacin,
cierra la puerta y ora a tu Padre que est en lo secreto; y tu Padre,
que ve en lo secreto, te recompensar.
Cuando ustedes ayunen, no pongan cara triste, como hacen los hipcritas,
que desfiguran su rostro para que se note que ayunan. Les aseguro que
con eso, ya han recibido su recompensa. T, en cambio, cuando ayunes,
perfuma tu cabeza y lava tu rostro, para que tu ayuno no sea conocido
por los hombres, sino por tu Padre que est en lo secreto; y tu Padre,
que ve en lo secreto, te recompensar.
San Mateo 6:1-6, 16-18
Su justicia: Es decir, las obras de la justicia; a
saber, el ayuno, la oracin, y en limosnas; que debe llevarse
a cabo no por ostentacin, o al fin de agradar a los hombres,
sino nicamente para agradar a Dios.
La Oracin Golpea la puerta, el Ayuno Obtiene y la Misericordia Recibe
De un sermn de San Pedro Crislogo, obispo (406-450)
Hay tres cosas que, hermanos mos, por los cuales la fe se mantiene firme,
la devocin se mantiene constante, y la virtud perdura. Ellos son la oracin,
el ayuno y la misericordia. La oracin llama a la puerta, el ayuno obtiene,
la misericordia recibe. La oracin, la misericordia y el ayuno: estos tres
son uno, y se dan vida los unos a los otros.
El ayuno es el alma de la oracin, la misericordia es la vida del ayuno.
Que nadie trate de separarlos, ya que no se pueden separar. Si tienes slo uno de
ellos o no tiene todos juntos, no tienes nada. As que si tu oras, ayuna;
quien ayuna, que se compadezca; si deseas que tu peticin sea escuchada, escucha la
peticin de los dems. Si tu no cierras tu odo a los dems entonces tu abrirs
el odo de Dios para ti.
Cuando tu ayunas, date cuenta del ayuno de los dems. Si quieres que Dios sepa
que tu tienes hambre, date cuenta del hamber de los dems. Si
tienes esperanza en la misericordia, muestra misericordia a otros.
Si buscas la bondad, muestra bondad. Si tu deseas recibir, d.
Si pides por ti mismo lo que niegas a los dems, su plegaria es una burla.
Que este sea el modelo para todos los hombres cuando practican la misericordia:
mostrar misericordia a los dems de la misma manera, con la misma generosidad,
con la misma prontitud, como tu quieres que otros muestran misericordia a ti.
Por lo tanto, haz que la oracin, la misericordia y el ayuno sea una sola splica
a Dios en nuestro nombre, una voz en nuestra defensa, una oracin unida por tres a
nuestro favor.
Usemos el ayuno para compensar lo que hemos perdido por despreciar a otros. Ofrezcamos
nuestras almas en sacrificio por medio del ayuno. No hay nada ms agradable que podemos
ofrecerle a Dios, como dijo el salmista en la profeca: Un sacrificio a Dios es un
espritu quebrantado; Dios no desprecia un corazn magullado y humillado.
Ofrce tu alma a Dios, haz una oblacin de tu ayuno, para que tu alma
pueda ser una ofrenda pura, un sacrificio santo, una vctima viva , permaneciendo
tuyo y al mismo tiempo de Dios. Quien falla en no darle esto a Dios no ser justificado,
por si vas a darte a El a ti mismo, nunca estars sin los medios para dar.
Para hacer esto aceptable, hay que aadir la misericordia. El ayuno no da fruto si no
es regado por la misericordia. El ayuno se seca cuando la misericordia se seca. La
misericordia es para el ayuno como la lluvia es para la tierra. Por mucho que
puedas cultivar tu corazn, limpia el suelo de tu naturaleza, acaba con los vicios,
siembra virtudes. Si no liberas las fuentes de la misericordia, tu ayuno no dar
fruto.
Cuando ayunes, si tu misericordia es dbil tu cosecha ser
delgada; t, cuando ayunes, lo que se vierte en misericordia se
desborda en tu granero. Por lo tanto, no pierdas por ahorrar,
pero junta mas, dispersando. Da a los pobres, y te das a ti mismo.
No se te permitir quedarte con lo que le has negado a los dems.
Joven Santo Toms de Villanueva Dividiendo su Ropa entre Nios Mendigos by Bartolom Estebn Murillo; 1667; Cincinnati Art Museum; Ohio, US;
https://commons.wikimedia.org
El Sermn de la Montaa - Via Vitae ("Estilo de Vida"), una obra maestra de la orfebrera y la joyera, Chaumet Paris Joseph (1852-1928) en representacin de las escenas clave de la vida de Jess Eucarstico, Museo Hiero,
Paray-le-Monial, Sane -et-Loire, Francia
https://commons.wikimedia.org
La Oracin de San Efrn
Oh Seor y Soberano de mi vida, mantenga lejos de m el
espritu de la indiferencia y el desaliento,
la lujuria del poder y la charla ociosa.
En su lugar, concdeme, tu siervo, el
espritu de la totalidad del ser, humilde de
espritu, con paciencia y amor.
Oh Seor y Rey, concdeme la gracia de ser
consciente de mis pecados y de no juzgar a mi
hermano, porque T eres bendecido ahora y para
siempre. Amn
Oracin de Cuaresma
Oh, mi Dios! que eres todo amor,
te doy gracias por haber establecido
el ayuno de la Cuaresma para purificar
mi conciencia, para fortalecer mi virtud,
y para hacerme digno de acercarme a Tu
santa mesa.
Concdeme la gracia de mantener el ayuno
como un Cristiano. Estoy decidido a amar a
Dios sobre todas las cosas y al prjimo como
a m mismo por el amor de Dios, y, en un
testimonio de este amor, me unir al ayuno con
la oracin y la limosna. Amn
Mircoles de Ceniza y el comienzo de la Cuaresma - Ofreciendo nuestros corazones a Dios
Este sitio est dedicado a Nuestro Seor Jesucristo
en la Santsima Virgen Mara
para la Gloria de Dios
se imparta (28 de Octubre, 2013)
Cooperatores Veritatis
Omnia ad majoren Dei Gloriam!
(Todo para la mayor gloria de Dios!)
Contctanos/escrbenos via email a [email protected]
El diseo y algunos materiales son ©2013-2021 por VerdadCatolica.Net - Todos los Derechos Reservados
Algunas obras rigen bajo licencia pblica o abierta - otras estn protegidas por derechos de propiedad intelectual de copyright de sus dueos.
top