Madres y hermanas muy queridas para m en Cristo: en primer lugar, esfurzate con todo tu poder y tu celo por ser abiertas de mente. Con la ayuda de Dios, trata de recibir un buen consejo que, guiado nicamente por el amor de Dios y el afn de salvar almas, pueda cumplir tu encargo.

Solo si las responsabilidades que se le han encomendado se arraigan firmemente en esta doble caridad, tendrn un fruto beneficioso y salvador. Como dice nuestro Salvador: Un buen rbol no puede producir malos frutos.

l dice: Un buen rbol, es decir, un buen corazn y un alma inflamada de caridad, no pueden hacer otra cosa que buenas y santas obras. Por esta razn, San Agustn dijo: Ama, y haz lo que quieras, es decir, que poseas amor y caridad y luego haz lo que quieras. Es como si hubiera dicho: la caridad no puede pecar.

Tambin te ruego que te preocupes por cada una de tus hijas. Llvalas, por as decirlo, grabados en su corazn, no solo sus nombres, sino sus condiciones y estados, cualquiera que sean. Esto no ser difcil para ti si las abrazas con un amor viviente.

Las madres de los nios, incluso si tienen mil, llevan a todos y cada uno fijo en sus corazones, y debido a la fuerza de su amor no se olvidan de ninguno de ellos. De hecho, parece que mientras ms nios tienen, ms aumenta su amor y cuidado por cada uno. Seguramente aquellos que son madres en espritu pueden y deben actuar ms de la misma manera, porque el amor espiritual es ms poderoso que el amor que proviene de una relacin de sangre.

Por lo tanto, madres queridas para m, si amas a estas hijas con una caridad viva y no afectada, ser imposible que no tengas todas y cada una de ellas grabadas en tu memoria y en tu mente. Te lo ruego de nuevo, esfurzate por atraerlas por el amor, la modestia, la caridad, y no por el orgullo y la dureza. Sean amables con todos segn las palabras de nuestro Seor: Aprendan de m, porque soy manso y humilde de corazn. As ests imitando a Dios, de quien se dice: l ha dispuesto todas las cosas placenteramente. Y otra vez Jess dijo: Mi yugo es fcil y mi carga es liviana.

Tambin debes ejercitar la amabilidad hacia todos, cuidando especialmente que lo que has ordenado nunca se haga por razones de fuerza. Porque Dios ha dado libre albedro a todos, y por lo tanto no obliga a nadie sino que solo indica, llama, persuade. Algunas veces, sin embargo, algo tendr que hacerse con un mandamiento ms fuerte, pero de una manera adecuada y de acuerdo con el estado y las necesidades de las personas; pero tambin debemos ser impulsados solo por la caridad y el celo por las almas.

 
 
"Si todos permanecen unidos de corazn, sern fuertes en las adversidades."

"Construye una comunidad donde sea que vayas."

"Da buen ejemplo: ensea ms por lo que haces que por lo que dices."

"Ten confianza, arriesgate con cosas nuevas, qudate con esto y entonces preprate para grandes sorpresas!"

"Porque si es Jess quien te dirige y te ensea, sers bien educado."

"Deja que Jesucristo sea tu nico tesoro."

"Esfurzate por ser fiel a lo que Dios te ha llamado."