El Sacrifcio para la Salvacin de la Humanidad
Cristo sobre la Cruz de Carl Heinrich Bloch (1834-1890); 1870; Museo de Historial Nacional, Dinamarca;
commons.wikimedia.org
Si cualquiera ha pecado, tenemos un Abogado con el Padre
Del Comentario sobre los Salmos por San Juan Fisher (1469-1535), obispo y mrtir
Nuestro alto sacerdote es Jesucristo, nuestro sacrificio es Su precioso cuerpo el qual fue inmolado sobre el altar de la Cruz para la salvacin de todas las personas.
La sangre que fue desparramada para nuestra redencin no fue la de cabras y terneros (como fue bajo la vieja ley) sino de la obeja ms inocente, Cristo Jess nuestro Salvador.
El templo en el cual nuestro alto sacerdote ofreci sacrificio no fue hecho por manos humanas, sino edificado por el poder de Dios solo. Perdi su sangre en vista del mundo, un templo confeccionado por la mano de Dios solamente.
Sin embargo, este templo tiene dos partes. La primera es terrenal, el cual habitamos ahora. La segunda es an desconocida para nosotros, seres mortales que somos.
Cristo primero ofreci sacrificio aqu en la tierra, donde padeci de la ms amarga muerte. Entonces, vestido en la prenda nueva de la inmortalidad, con su propia sangre entrando en el sanctasanctrum, es decir, el Cielo. Ah l tambien exhibi ante el trono del Padre Celestial esa sangre de un precio inmesurable, la cual l derram siete veces en parte de todos los hombres sujetos al pecado.
Este sacrifcio es tn agradable y aceptable para Dios que tan pronto l lo vi seguro tuvo piedad por nosotros y extendi clemencia para todos nosotros tambien - es decir para quienes estan arrepentidos de verdad.
Adems, es eterno. Es ofrecido no solamente cada ao (como con los Judios) sino tambien cada da para nuestro consuelo y de verdad a cada hora y momento tambien, para que podamos tener mayor razn para sentirnos cmodos. Es por esto que el Apstol agrega: l nos ha asegurado una redencin eterna.
Todos los que se han embarcado en una verdadera contricin y mortificacin por los pecados que han cometidos y que estn resueltos con firmeza en no pecar mas en el futuro, sino en perseverar constantemente en la bsqueda de virtudes que han ahora empezado - todos estos se hacen compartidores de este santo y eterno sacrificio.
San Juan pone todo esto ante nosotros con estas palabras: mis pequeos nios les escribo esto para que no pequen ms. Pero si alguno an peca, sepan que tienen un abogado con el Padre, Jesucristo, el honrado y recto. Ademas, l es la propiciacin de nuestros pecados y, es tambien no solo de nuestros pecados sino tambien de los del mundo entero.
El Sacrifcio para la Salvacin de la Humanidad - del Comentario sobre los Salmos por San Juan Fisher (1469-1535), obispo y mrtir
Este sitio es dedicado a Nuestro Seor Jesucristo
en la Santsima Virgen Mara
para la Gloria de Dios
La Bendicin Apostlica de la Santa Sede en Roma se imparta (28 de Octubre, 2013)
Cooperatores Veritatis
Cooperatores Veritatis
Omnia ad majoren Dei Gloriam!
(Todo para la mayor gloria de Dios!)
Contctanos/escrbanos via email a [email protected]
El diseo y algunos materiales son ©2013-2020 por VerdadCatolica.Net - Todos los Derechos Reservados
Algunas obras rigen bajo licensia pblica o abierta - otras estn protegidas por derechos de propiedad intelectual de copyright de sus dueos.