Podemos decir en Verdad que Jess es el Fruto del Corazn de Mara como as es de su vientre; que los fieles son los frutos de ese mismo corazn, debido a que las virtudes mismas de la Fe, la Humildad, Pureza, Amor y Caridad, las cuales la rindieron digna de convertirse en la Madre de Dios, la hizo tambien Madre de todos los nios de Dios.

As como el Eterno Padre le di el poder en concebir a Su Hijo en su corazn y en su vientre virgen, vistiendola de la Divina Virtud con la cual El gener a Su Hijo Divino para toda la Eternidad en Su Propio Vientre Adorable, tambien Dios le otorg a ella el poder para formarlo a Cristo y parirlo en los coraznes de los hijos de Adn, quienes entonces se hicieron miembros de Jesucristo e hijos de Dios.

An siendo que Mara concebi y llevar eternamente a su Hijo Jesucristo en su corazn, ella tambien concibe y lleva para siempre en ese mismo corazn a todos los santos miembros de nuestro Cabezal Divino. Son sus hijas e hijos amados, los frutos de su corazn maternal, y ella los ofrece la Divina Majestad como un sacrificio perptuo.

Yo podra citar a muchos santos Padres e Doctores ilustres para mostrar como el Omnipotente Dios salv la humanidad "donde estuviera sobre la tierra". Es decir, en el sagrado corazn de Maria, Madre de Jess. Su corazn coper con Su Divina Misericordia, habiendo recibido tal plenitud de gracias. De acuerdo con el Doctor Angelical, Santo Toms, ella fue hecha capaz de coperar con su Hijo en la Salvacin de todos los hombres. Esto lo inspir a San Bonaventure a decir que el corazn de Maria es la fuente de la Salvacin Universal: "Toda Salvacin brota del corazn de Mara."

Con todo esto concedido, cuales deben ser entonces nuestras obligaciones al mas caritatvo corazn de nuestra Beata Madre!

Que gratitud podemos mostrar, con que alabanzas podemos cantar, que fiesta podemos celebrar en honor de su corazn, dignos de merecer su excesiva caridad hacia nosotros, y de los favores que se nos otorgaron por la divina misericordia a travs de su intercesin?

Mara es el centro de la tierra en el cual nuestra Salvacin yace. Ella es tambien el centro del mundo renovado: el mundo Cristiano, el camino del hombre nuevo, el mundo del Amor Divino y la Santa Caridad.