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Sermn sobre el Sacerdocio de El Pequeo Catequismo
del Cura de Ars
por San Juan Mara Vianney (1786-1859)
Hijos mios, hemos llegado al Sacramento de Ordenamiento. Este Sacramento eleva el hombre a Dios. Quien es un sacerdote? Es un hombre que toma el lugar de Dios--un hombre vertido con todos los poderes de Dios. "Anda," le dijo Nuestro Seor al sacerdote; "tal como Mi Padre me envi, yo te envo. Todo el poder entero se me ha dado en el Cielo y en la tierra. Ve entonces, ensea a todas las naciones. . . ." Quien te oye a ti, me oye a Mi. Aquel que te desprecia me desprecia. Cuando el sacerdote remite los pecados, el no dice "Dios te perdona"; l dice, "te absuelvo." Durante la Consagracin, l no dice, "Este es el Cuerpo de Nuestro Seor;" l dice, "Este es Mi Cuerpo."

San Bernardo nos dice que todo nos ha llegado a travs de Mara; y tambien podemos decir que todo nos ha llegado a travs del sacerdote; si, toda felicidad, toda gracia, todo regalo celestial. Si no tuvieramos el Sacramento de Ordenacin, no lo tendramos a Nuestro Seor. Quien lo coloc ah en ese tabernculo? El sacerdote lo hizo. Quien recibi tu alma, al entrar en esta vida? El sacerdote. Quien lo alimenta, le da la fuerza para hacer su pelegrinaje? El sacerdote. Quien lo ha de preparar para aparecerse ante Dios, lavando a ese alma, por ltima vez, en la sangre de Jesucristo? El sacerdote - siempre el sacerdote. Y si ese alma llegara al punto de la muerte, quien lo va a elevar? Quien lo va a restaurar a la calma y la paz? Una vez mas, el sacerdote. No puedes pensar en un sola bendicin de Dios sin encontrar, al lado con esa recoleccin, la imagen del sacerdote.
Vete a confesarle a la Santsima Virgen, o a un ngel. Han de absolverte? No. Te darn el Cuerpo y la Sangre de Nuestro Seor? No. La Santsima Virgen no puede hacer que su Divino Hijo descienda a la Hostia. Tal vez tengas doscientos ngeles ah, pero no te absolvern. Un sacerdote, no importa cuan sencillo sea, lo puede hacer. Te puede decir, "Vaya en paz; te perdono." Oh, que grandioso es un sacerdote! El sacerdote no entender la enormidad de su oficio hasta que l est en el Cielo. Si lo comprendiera en la tierra, se morira, no de temor, sino de amor. Los otros beneficios de Dios no serviran para nada sin el sacerdote.

De que servira una casa llena de oro, si no tuvieras a nadie que te abriera la puerta? El sacerdote posee la llave de los tesoros celestiales. Es l quien abre la puerta; l es el sobrecargo del buen Dios, el distribuidor de Su riqueza. Sin el sacerdote, la Muerte y la Pasin de Nuestro Seor nos seran inutil. Mira a los brbaros: que provecho han sacado de la muerte de nuestro Seor? Als! No pueden compartir en las bendiciones de la Redencin mientras no tengan sacerdotes para aplicar Su Sangre a sus corazones!
Un sacerdote no es sacerdote para si mismo; l no se auto-absuelve; no se auto-administra los Sacramentos. El no es ni existe solo para si mismo. l es y existe para ti. Despues de Dios, el sacerdote es todo. Deja a una parroquia estar veinte aos sin sacerdotes y ah terminaran adorando bestias. Si el Padre misionero y yo nos vayaramos, ustedes se preguntaran, "Que podemos hacer en esta iglesia? Ya no hay mas Misa; Nuestro Seor ya no est aqu, por ende deberamos rezar en casa." Cuando la gente quiero destruir la religin, comienzan atacando al sacerdote, porque donde ya no hay mas un sacerdote no hay sacrificio, y donde no hay cualquier sacrificio ya no hay mas religin.

Cuando la campana te llama a la iglesia, si alguien te preguntara, "Adonde vas?" tal vez contestes, "voy a alimentar mi alma." Si alguien te preguntara, sealando al tabernaculo, "que es esa puerta dorada?" "Ese es nuestro almacn, donde guardamos el verdadero Alimento de nuestros almas." "Quien tiene la llave? Quien llace en las provisiones? Quien prepara la fiesta, y quien sirve la mesa?" "El sacerdote." "Y cual es el alimento?" "El precioso Cuerpo y la Sangre de Nuestro Seor." Oh Dios! Oh Dios! Como nos has amado! Mira el poder del sacerdote; de un pedazo de pan la palabra de un sacerdote hace un Dios. Es mas que crear al mundo. Alguien dijo, "Entonces, Santa Filomena obedece al Cura de Ars?" De cierto, ella muy probablemente lo obedece, ya que Dios lo obedece a l.
Si yo conociera a un sacerdote y a un ngel, debera saludarlo al sacerdote antes de saludarlo al ngel. El ltimo es un amigo de Dios, pero el sacerdote ocupa Su lugar. Santa Teresa besaba el suelo por donde un sacerdote haba pasado. Cuando ves a un sacerdote, deberas decir, "Ah est quien me hizo un hijo de Dios, y me abri el Cielo por medio del Bautismo Sagrado; l me purific luego de haber pecado; l es quien nutre mi alma." Al ver una torre de una iglesia, tal vez digas, "Que se encuentra en ese lugar?" "El Cuerpo de Nuestro Seor." "Porqu l est ah?" "Porque un sacerdote estuvo ah, y recit la Santa Misa."

Que alegra sintieron los Apstoles despues de la Resurreccin de Nuestro Seor, al ver el Maestro quienes tanto! amaron. El sacerdote debe sentir la misma alegra, al verlo a Nuestro Seor, sujetndolo en sus manos. Se les d un gran valor a los objetos en Loreto que han sido colocados en la taza de beber de la Santsima Virgen y de su Nio Jess. Pero los dedos de un sacerdote, que han tocado la adorable Carne de Jesucristo, que han sido sumergidos en la cliz que contiene Su Sangre, en el pix donde Su Cuerpo se ha puesto: no son an mas preciosos? El sacerdocio es el amor del Corazn de Jess. Cuando lo mires al sacerdote, piensa en Nuestro Seor Jesucristo. Amn
https://catholicharboroffaithandmorals.com
Santa Filomena Apareciendo ante San Juan Mara Vianney; Reliquario de Ars, Francia; https://www.philomena.org
Acto de Amor del Santo Cura de Ars
Te amo, Oh mi Dios.
Mi nico deseo es amarte
Hasta el ltimo suspiro de mi vida.

Te amo, Oh infinitamente amoroso Dios,
Y prefiero morir amndote
que vivir un instante sin Ti.

Te amo, oh mi Dios, y mi nico temor es ir al infierno
Porque ah nunca tendra la dulce
consolacin de tu amor,

Oh mi Dios, si mi lengua no puede decir
cada instante que te amo,
por lo menos quiero que mi corazn lo repita
cada vez que respiro. Ah, dame la gracia
de sufrir mientras que te amo,
Y de amarte mientras que sufro,
y el da que me muera
No solo amarte
pero sentir que te amo.
Te suplico que mientras ms cerca ests de mi hora
Final aumentes y perfecciones mi amor por Ti.
Amn.
Oracin para los Sacerdotes A travs de la Intercesin
de San Juan Mara Vianney
Mas misericordioso Padre Celestial, te damos las gracias por nuestros fieles sacerdotes y obispos, cuyos paterna espiritualidad y ejemplos de fidelidad, sacrificio propio y devocin son tan vitales para la f de tu gente.

Que nuestros padres espiritaules sean guiados por el ejemplo de San Juan Vianney. Dales una f valiente ante la cara de la confusin y el conflicto, esperanza en los tiempos de problemas y dolor, y amor duradero para Ti, para sus familias, y para toda tu gente en todo el mundo. Que la luz de Tu Verdad ilumine sus vidas y sus buenas obras.

Asiste a todos tus padres espirituales para que, a travs de Tu gracia, puedan crecer consistentemente en santidad y en el conocimiento y la comprensin de Tu Verdad. Que generosamente impartan esta sabidura a aquellos que necesitan de ella. Por Jesucristo Nuestro Seor. Amn
Dios Padre y ngel por Giovan Francesco Barbieri; 1620; Musei di Strada Nuova, Genoa, Italia; https://commons.wikimedia.org
8 de Agosto - San Juan Mara Bautista Vianney - El Sacerdote Posee la Llave - Santo Patrono Universal de los Sacerdotes
 
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se imparta (28 de Octubre, 2013)
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